Oportunidades Deep Tech hasta en “la sopa”

En un pasado, no muy lejano…

Hablar de empresas de base científica y tecnológica era casi “ciencia oculta” hasta hace no tantos años. Recuerdo que la primera vez que escuché nombrar este concepto fue a principios de este siglo, en una conferencia orientada por funcionarios de la Incubadora de Empresas de Base Tecnológica de Antioquia, o IEBTA, como les gustaba que la llamaran.

El concepto resultaba a la vez sencillo, complejo y poderoso. Una empresa que tenía su núcleo de negocios (core business), alimentado por conocimiento generado en procesos de producción científica o de desarrollo tecnológico.

No sólo de startups vive la base tecnológica

El acelerado crecimiento de Internet, en todas las esferas de la vida cotidiana, impulsó un fenómeno cultural, económico y social nunca antes visto. En pocos años pasamos de un mundo donde la información era difícil de acceder y era considerada fuente de poder, a una dinámica de libre acceso a la información, prácticamente desde cualquier lugar y en cualquier momento.

De igual manera, se facilitó el nacimiento de nuevas empresas, de nuevos modelos de negocios y de nuevas tecnologías. Sin lugar a dudas, la aparición de los teléfonos inteligentes (smartphones), fue la que cambió para siempre el campo de juego de los negocios.

Internet se convirtió en el campo fértil donde crecieron – y siguen creciendo – las empresas más grandes, innovadoras y disruptivas de nuestra era. No sólo eso, también propició el surgimiento de literalmente miles de nuevas empresas, las llamadas startups, que armadas con un lienzo de modelo de negocios (business model canvas), una aplicación para smartphones (app), y una estrategia de crecimiento (growth strategy), impulsada por capital de riesgo, se transformaron en el estándar de facto para el emprendimiento.

Esa relación estrecha entre éstas nuevas empresas y las tecnologías base de Internet, fue posicionando el nombre de startups tecnológicas, que poco a poco se fue confundiendo con las empresas de base tecnológica, a tal punto que es común que muchas personas consideren que son lo mismo.

Pero, si bien se puede llegar a considerar que todas las startups tecnológicas son empresas de base tecnológica, no todas las empresas de base tecnológica son startups tecnológicas. Parece trabalenguas.

Deep Tech al rescate

En el año 2014, Swati Chaturvedi, cofundadora de la plataforma de inversión Propelx, acuñó el término Deep Tech para enfatizar la diferencia con las startups tecnológicas “tradicionales”, señalando que las empresas Deep Tech tienen sus bases en los descubrimientos científicos y en las innovaciones tecnológicas, para buscar solucionar grandes problemas del mundo. Es decir, una definición muy cercana a la de las empresas de base científica y tecnológica.

La verdad, me identifico mucho más con el nombre Deep Tech. Suena más “sexy”, mucho más atractivo y significativo, en la medida que hace énfasis en lo profunda (Deep), que es la conexión con la ciencia y la tecnología (Tech).

De acuerdo con el reporte “Deep Tech, La Nueva Ola”, divulgado por el BID Lab en junio de 2023, en Latinoamérica y el Caribe estamos en medio de un big bang de innovación en Deep Tech. Sectores como los de robótica, manufactura avanzada, inteligencia artificial, computación infinita, materiales avanzados y energías limpias, además de muchos otros, vienen creciendo a pasos agigantados, permeando múltiples capas de la economía, la cultura y la vida diaria.

Estas tecnologías están alineadas con la resolución de los grandes desafíos de nuestro mundo actual, los cuales afectan por una parte al planeta como tal y por otra a nosotros los seres humanos.

El ejemplo más palpable de Deep Tech en la vida diaria es ChatGPT, servicio de la empresa OpenAI, que popularizó el uso de la inteligencia artificial para diversas tareas, desde las más sencillas hasta las más complejas.

Sin embargo, en nuestra región, aún el número de empresas Deep Tech no es tan elevado, lo que al mismo tiempo representa una gran oportunidad de crecimiento en el corto y mediano plazo, siempre y cuando los ecosistemas de emprendimiento e innovación realicen ajustes que faciliten mejores condiciones para este tipo de empresas.

Colombia, grandes oportunidades en Deep Tech

Según el informe Deep Tech Colombia 2023, elaborado por MenteX, en nuestro país el ecosistema Deep Tech puede llegar a convertirse en el principal agente dinamizador de la transición climática, especialmente por el avance que tienen sectores como salud (HealthTech), y energía, y por los nuevos desarrollos en los sectores agro (AgroTech), de alimentos (FoodTech) y de protección de la diversidad biológica.

Este mismo informe señala oportunidades específicas en las cuales se pueden enfocar las empresas Deep Tech locales, tales como:

• En AgroTech y FoodTech
  • Desarrollo de variedades vegetales y frutales mejoradas.
  • Diseño de controles biológicos, además de fertilizantes y pesticidas ambientalmente responsables.
  • Optimización de alimentos para animales.
  • Tecnologías avanzadas para actividades agrícolas como el riego y la distribución de productos.
  • Optimización de cultivos a partir de la captura y análisis de datos a gran escala.
• En HealthTech
  • Personalización del cuidado de pacientes.
  • Prevención de enfermedades.
  • Información en tiempo real para el paciente.
  • Atención médica en poblaciones remotas.
  • Reducción de la incidencia de enfermedades de alto costo.
  • Descentralización de servicios médicos.
• En EnergyTech y ClimaTech
  • Optimización del uso de energías, especialmente para el consumo de maquinarias industriales, basada en analítica de datos.
  • Prevención de fallos en equipos y redes de distribución energética.
  • Tecnologías para la inspección y mantenimiento de infraestructura energética.
  • Gestión de picos de demanda energética, mediante sistemas de almacenamiento de energía.

A ajustar los ecosistemas de emprendimiento e innovación

Puede sonar al famoso dicho de “cuando me aprendí las respuestas, me cambiaron las preguntas”, pues cuando ya hemos logrado cierta madurez en los ecosistemas locales y regionales de emprendimiento e innovación, para la generación frecuente de nuevas startups tecnológicas, ahora vendría la necesidad de crear nuevas condiciones que sean favorables también para las empresas Deep Tech.

La buena noticia en este sentido, es que todas las lecciones aprendidas son aplicables al mundo Deep Tech, no estamos empezando de cero y por el contrario, podemos tomar ventaja de errores cometidos en el pasado.

Algunos puntos incluyen:

• Comprender que el desarrollo de Deep Tech implica ciclos de prueba más extensos, usualmente con la necesidad de acceder a instalaciones y equipos especializados,y con condiciones de infraestructura más demandante que para el desarrollo de startups.
• Tener en cuenta que los requerimientos de capital inicial suelen ser más altos en Deep Tech, lo que es compensado con la gran oportunidad de retorno a la inversión que representan los diversos mecanismos de propiedad intelectual que pueden ser implementados.
• Si bien metodologías basadas en validación rápida con clientes reales son aplicables, al mismo tiempo debe entenderse que no es tan sencillo generar tracción temprana en este tipo de desarrollos, por lo que basar decisiones de apalancamiento en métricas de crecimiento temprano no hace sentido y debe acudirse a modelos predictivos del potencial éxito de la empresa Deep Tech.

Son muchos los elementos de discusión que quedan abiertos, por lo que los invito a descargar los dos reportes en que se basa esta columna de opinión, y así nutrir la conversación.

Informe Deep Tech Colombia 2023 – Descarga

Deep Tech, La nueva ola – Descarga

También pueden descargar el documento resumen que elaboré sobre las Oportunidades Deep Tech para Colombia – Descarga

Me encanta conversar sobre estos temas, así que no duden en enviarme un mensaje si desean profundizar.

Esta columna la publiqué originalmente en LinkedIn.